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Relato Travesti Hanna Marks y su morcillón me abrieron en canal.


RELATO TRAVESTI ESPAÑA: Hanna Marks y su morcillón me abrieron en canal.
Autor: manolaman

Buenas,

Hacía siglos que no me pasaba al lado oscuro del folleteo y todo y que inicialmente quería follar con Christine Moraes no pudo ser ya que tras hora y media tratando de contactar con ella sin respuesta alguna decidí decantarme por otra (mira que le tengo ganas pero hoy ya debía estar empachada de tanta polla).

Tras tantear webs de contactos de travestis decidí por decantarme por Hanna Marks. La verdad es que me sorprende que haya tan poca información de ella ya que está muy buena. La tranca que tiene es enorme y se implica con ganas (se nota que le gusta). Tras quedar con ella por telefono. Para estar una hora voy para su casa a la velocidad de la luz. Tras un par de llamadas para que me indique su piso (no te da la dirección exacta en la primera llamada) me planto allí. Y al abrir la puerta veo a esa pedazo de hembra con polla. Madre mía cada teta suya era como mi cabeza. Ella es alta, guapa, con unas tetas enormes y un culo (que a mi opinión) se le ha ido un poco la mano con la silicona. Pero bueno, se puede follar y mola ver como se le tambalean las nalgas cuando las mueve.


Tras un par de besos, un poco de conversación y una duchica me agarra y me empieza a morrear de manera que no se aún como no le salió la lengua por mi nuca. Besos y morreos pasionales sin parar y manoseo mutuo al cuerpo mientras poco a poco me empieza a quitar la ropa hasta que al final se pone de rodillas, me baja los pantalones y me la empieza a chupar frenéticamente. Se la mete entera y te la come con ganas, brutal. Luego ya nos pusimos en la cama y se quitó el body negro que llevaba. Luego empezó a estamparme las enormes tetas en la cara para que se las comiera y la verdad. Me sorprendió que todo y que están operadas no están tan duras como a otras trans.

Yo las iba sobando suavemente y ella me suelta "¡aprieta fuerte!" y yo como buen cumplidor le estrujé las tetas y se las comí hasta quedar empachado pero pronto iba a venir el segundo plato ¡el morcillón!. Tras quitarse el tanga veo que su grosor es notable y a medida que le daba a la zambomba mientras ella me la comía se le ponía grande que incluso daba un poco de respeto. Es bastante larga y su grosor me atrevería a decir que es como el de Ivete Montello, es decir, que si no tienes una boca como la del joker no te la tragas entera.


Tras unas comidas mutuas de rabo se puso un condón en un dedo para ir dilatando mi ojete mientras me la comía, luego con dos dedos y al final enfundó el morcillón y tras unos minutos y con paciencia entró toda entera. Echaba de menos esa sensación ligera de dolor y placer extremo a la vez. Boca arriba zumbándome, a 4 patas zumbándome y luego yo encima y pajeándome mientras me metía caña hasta correrme en sus tetas.

Nos limpiamos un poco y estuvimos un rato charlando y he de decir que es una cachonda en mayúsculas, muy agradable y cada dos por tres se estaba riendo por alguna tontería que le soltaba y en general buen feeling. Tras unos minutillos hablando se me tiró encima estando yo boca arriba y empezó a comerme los morros de nuevo y a restregar todo su cuerpo por el mío. En ese momento me sentí obligado a pedirle que me hiciera una cubana y luego volví a meterme su morcilla en la boca que ya la estaba echando de menos.



El segundo polvo fue más o menos igual el primero salvo que primero se la metí un rato a ella a 4 patas y luego ella a mí. Estuvimos bastante rato y yo ya estaba sudando de tanto movimiento pero no conseguí correrme (el primer polvo me dejó los huevos más secos que una compresa). Entre coñas y buen rollo me fui a la ducha a lavarme y al volver me iba a ir pero me soltó un "quiero un chupachups", me bajó los pantalones que ya me había puesto y me la estuvo comiendo un ratito más y me iba soltando frases rollo "quiero tu leche en mi boca" pero nada, soy gafe y todo y que me daba un gustazo enorme mis huevos estaban en huelga y no producían lefa.

Al final me limpié con unas toallitas, me acompañó a la puerta. Me dio dos besos, y me fui con una sonrisa de oreja a oreja.

La verdad es que por la hora y su grado de implicación me sorprende que no haya apenas relatos de ella.

Saludos!



Publicado el November 07, 2017 at 12:00 am

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